domingo, 26 de junio de 2022

El parto infinito de Mondolín Bocachancla y la botella de agua calentorra

Mondolín Bocachancla nos cuenta su anécdota del cólico renal.




La psicosis del aceite de girasol

Breve análisis de la psicosis generada en torno al repentino consumo de aceite de girasol.



Homenaje a los sanitarios

Este pasodoble con música de la comparsa Los Renacidos (letra de Miguel Ángel García Argüez 'el Chapa' y música de Raúl Cabrera) es mi particular homenaje a todos aquellos sanitarios que se enfrentaron a la COVID en primera línea de batalla. Infinitamente agradecido.




Nunca saldrás en los libros

de nuestra hipócrita historia.

No adornarán tus solapas

medallas de plata, ni de oro de ley.


Tú luchaste en la vanguardia por este país

que hoy te condena al olvido

y que te empuja hacia el abismo

y en el ostracismo te toca sufrir.


Te enfrentaste sin dudarlo,

sin escudo y sin espada,

nunca buscabas la gloria.


Cuántos aplausos que se han marchitado

en los balcones de nuestra memoria.

Y cuántas vidas has salvado de un virus cabrón,

de las garras de la muerte.

Cuántos milagros se anotaron a algún dios

o al capricho de la suerte.


Héroes del anonimato,

ejemplo de valentía.

No puedo saldar la deuda

que contraje frente a ti,

pero esta te la debía.


Por eso quiero decirte

ay, amigo sanitario,

gracias por desvivirte

y soportar este calvario.


Con los hospitales llenos y las ucis colapsadas,

combatiste a la muerte, la miraste cara a cara,

con tus fuerzas consumidas,

jamás eludiste batalla.


Y ante ti clavo rodilla y presumo en estos versos

de tu entrega y tu coraje que merecen monumentos.

Para que nunca se olvide

el valor de tu épico esfuerzo.


Pasodoble original de la comparsa Los Renacidos


Soneto a la escalera

Este poema va dedicado a la escalera imperial del Colegio de las Reales Escuelas de la Inmaculada de Córdoba. 


Imperial surges desde el patio rojo

Tan inmaculada asciendes al cielo

Con tu luz tan divina de consuelo

Gallonada cúpula de cerrojo.


Te elevas inmutable por tu antojo

Rosa de los vientos y mis anhelos

Oscuros peldaños de terciopelo

Embelesa avistarte de reojo


Simetría toscana en tu cintura

De conchas y acantos engalanada

Guardan tu elegante y sobria figura


De rojo, blanco y negro enmascarada

Tu imponente y marmórea finura

Tu barroca y cordobesa mirada

Oda a la cerveza

Este pasodoble con música de la comparsa Los Listos (letra de M.Á. García Argüez 'el Chapa' y música de Manuel Sánchez Alba 'el Noly) es una oda dedicada a la cerveza.


Eres la rubia amarga,

compañera eterna,

el amor prohibido.

Eres clara de luna

que rebosa espuma

en los aperitivos.

 

El néctar de los dioses,

ladrona de los besos.

Eres mi fiel amante

que en cada rincón

me pinta coloretes

y me amotina el corazón.

La que me nubla

toa la razón.

 

Hoy me toca arrepentirme

por toas esas veces que te he negao

cuando solo era un chiquillo

y no conocía de tus pecaos,

de tus pecaos, de tus pecaos.

 

Nuestro amor que se fraguó

sobre la mesa de la alegría

y rodeao de nuestros amigos.

 

Ese amor, que vive preso tras un cristal

o en una cárcel que es de aluminio.

Te libero de tu exilio.

 

Si Jesús hubiese conocido toda tu belleza

no pondría vino en su última cena,

ni sería recio el peso de su cruz.

 

Confidente de las aceitunas,

del mantel caliente.

Eres tan sincera

y tan desobediente,

que en la barra de un bar

no puedo perdonar

el tomarme una cerveza rodeao

de toa mi gente.


Pasodoble original de la comparsa Los Listos

Pueblo ¡levántate ya!

Este pasodoble con música de la comparsa Los Mafiosos (Juan Carlos Aragón) fue el que presenté durante el segundo curso de 'Escribir carnaval' impartido por el gran poeta carnavalero Miguel Ángel García Argüez 'el Chapa'. Esta letra de enfoque meramente reflexivo pretende enviar una llamada de atención a la clase trabajadora para que reaccione ante el abuso de los poderosos.


Su dios es el sucio dinero.

Su dios no predica entre pobres.

Es un dios tan poderoso y embustero

que destapa la avaricia de los hombres.


Su dios solo mira hacia arriba,

no quiere mirar hacia abajo.

Lo veneran los ladrones

que se llevan comisiones

vistiendo traje y corbata.

Enmarañan la justicia

y se esconden como ratas.

 

Egoístas sin ninguna empatía,

sin escrúpulos, no saben qué es eso.

Privatizan hasta la luz del día

y de cómplice el Congreso.

 

Cleptómanos de pedigrí,

trileros de puerca moral,

se envuelven en una bandera

y se limpian el culo con tu dignidad.

 

Ojalá que llegue el día

que el obrero se levante

y nos llevemos p'alante

toda esa escoria canalla.

 

Nuestra conciencia de clase,

esa que a ellos le sobra,

deje de ser una sombra

y retumbe por la calle.

 

No podemos permitir,

no podemos permitir

que nos roben el futuro.

Pueblo levántate ya,

pueblo levántate ya

y muestra un poco de orgullo.

 

Salta del sofá y únete a tu gente.

Corre, lucha, grítales bien fuerte

para que cambie nuestra suerte.

 

Que se encienda una chispa de revolución,

y termine el banquero juntito a su dios,

acurrucados debajo de un puente.



Pasodoble original de la comparsa Los Mafiosos


El pirata rendido

Este pasodoble con música de la comparsa Los Piratas (Antonio Martínez Ares) fue el que presenté durante el primer curso de 'Escribir carnaval' impartido por el gran poeta carnavalero Miguel Ángel García Argüez 'el Chapa'. Esta letra de enfoque puramente narrativo cuenta la historia de un pirata que arriba a las costas de la Tacita y decide abandonar la piratería tras caer rendido ante los encantos de la ciudad.



Como soy un buen pirata

que no le teme a los vientos,

vine a robarte la plata.

Pero te miré a la cara

y se nubló mi pensamiento.

 

Navegando por tus calles

el sentío lo perdí.

Mi fiel juramento

sin dudarlo ni un momento

traicioné solo por ti.

 

Y frente al Falla

donde libran sus batallas

las huestes de Don Carnal,

por alegrías

resonó una melodía

que me dio la libertad, libertad.

 

En cada esquina,

un cañón en cada esquina

disparando serpentinas.

¡Qué bien que llegué en febrero!

Ya no soy un bucanero

ahora soy un gaditano.

 

Y en una esquina

me deshice de mi espada

ya no me servía de nada

con el verso entre mis manos.

 

Abandono el galeón

el saqueo ha terminao.

Cádiz dueña de mi amor

eres tú quien me ha robao.

 

Yo me rindo ante tus pies,

me convierto en tu rehén.

Y es que he sío tan canalla

que reniego del edén

pa morirme aquí en tu playa.



Pasodoble original de la comparsa Los Piratas





Mi piropo a Cádiz

Este pasodoble con música de la comparsa Los Irracionales (Jesús Bienvenido) es mi particular piropo a Cádiz.

Eres la dama valiente
que me embruja el alma.
Eres la patria del verso,
eres la pasión.
La melodía que embelesa al corazón,
ese veneno que me nubla la razón.
El elixir de la verdad,
la diosa de la libertad,
mi compañera a la orilla del mar.

Tú eres la reina que se disfraza
de 3x4 por las esquinas,
eres la musa que va descalza
sin miedo y sin pausa, eres la tempestad.

La que inunda las calles de color,
cuando estalla febrero
el abrazo infinito
que roba la vida a los carnavaleros.

Eres el campo de batalla
donde vienen a luchar
los cuatro vientos, los cuatro vientos, los cuatro vientos.
Eres la fragua donde pare la alegría
forjada a fuego lento.

La playa donde el Sol viene a morir,
la huella del fenicio original,
desierto convertido en un jardín
para Adán, para Adán, para Adán.

Eres la madre del arte
de donde el fanfarrón Napoleón Bonaparte
se tuvo que largar
y sin poder conquistarte,
no pudo soportar tanta belleza.

Un laberinto eterno
pa perderme en tu cintura
y pasar toda una vida
saboreando, saboreando, saboreando
esta bendita locura.


Pasodoble original de la comparsa Los Irracionales

El milagro de la vida

Este pasodoble con música de la comparsa Los Encaidenaos (Kike Remolino) va dedicada al nacimiento del hijo de un amigo.


Tu carita es la esperanza,

el milagro de la vida.

Tu carita es un te quiero

que me llena de alegría.

 

Son tus manos un regalo

que me aprietan con dulzura.

Son tus manos un delirio,

son el motivo de mi locura.

 

Con tus pies aprenderás

por el camino, por el camino,

que tendrás que pelear

por tu destino,

por tu destino.

 

No hallarás mayor verdad

que la de los besos

y las caricias

que da una madre.

Esa medicina

te curará ‘toitos’ los males.

No entiende de médicos

ni recetas

porque se lleva en la sangre.

No hay na en el mundo

que sea más grande.

 

Duérmete tranquilo

que yo te cuido

mi niño

¿Qué quieres que yo le haya?

Porque yo te miro

y es que se me cae la baba.

 

Que se entere todo el mundo

que ha nacido un carnavalero.

Mi niño guapo,

mi niño guapo

cómo te quiero.



Pasodoble original de la comparsa Los Encaidenaos


A la amistad en la distancia

Este pasodoble con música de la comparsa de Los Peregrinos (Juan Carlos Aragón) está dedicada con mucho cariño a mis amigos del sur emigrados en el norte.


A veces la vida te premia con oro,

el de la amistad.

No hay más grande tesoro

que pueda encontrar.

El regalo bendito

de un ser infinito que te lo da todo.

 

Amigo es una palabra gigante.

Sentir que un amigo está ahí

pa poder compartir

un millón de aventuras.

Cantar a la orilla del mar

hasta no poder más

y bailen las estrellas.

Brindar hacia la inmensidad

por la felicidad

que nos queda delante.

 

La amistad,

la flor de la amistad

que en primavera rebrota más fuerte

Como el corazón más canalla y valiente.

El de dos amigos

que siguen unidos

y por el camino

se beben la vida hasta la eternidad.

 

 

Que cuando se fue pa'l norte

miré al horizonte

y le dije hasta luego,

que prontito nos veremos

¿Cómo te voy a olvidar?

 

Y ahora yo te miro a la cara

y te canto un pasodoble

con mi voz y sin mi guitarra

por ser un alma tan noble.

Dedicado a la buena gente

esa que está aquí a mi vera.

Que no puedo tener más suerte,

que todo el mundo lo vea.

 

Como nos dijo el poeta

cuando estuvo condenao,

un amigo es un amigo

y de eso no me he olvidao.

Por eso nuestra amistad

no se compra con dinero,

que no hay en el mundo entero

na que lo pueda pagar.

 

Es la historia sin final

de una noche de jarana

cuando el mundo se paró

hasta que nos dio la gana.

 

Con la luna por testigo

y con un nudo en la voz.

Que yo te regalo mi corazón

pa que hagas con él

lo que tu prefieras.

 

Por eso, mi amigo,

ven y disfruta conmigo

y se mueran las penas.


Pasodoble original de la comparsa Los Peregrinos

Perdido

Este poema no es más que un amateur intento de crear una canción de autor.


Paseador de sueños
Errante en las aceras
Paria en el destierro
Caminante sin vereda

Brújula sin norte
Playa sin arena
Susurro que en la noche
Despierta a la luna llena

Bandolero sin botín
Jornalero del silencio
Enanito sin jardín
Monje sin convento

Sin identitad
Rumbo a mar abierto
Con el mundo por montera
Y los cordones medio sueltos

Pirata de agua dulce
Bohemio sin desván
Navidad sin luces
Perchero en el zaguán

Una plaza sin palomas
Vacía de migas de pan
Un fugitivo que se asoma
Huyendo de la realidad

Un cascabel sin gato
Una correa sin estrenar
Un peregrino sin zapatos
Una estrofa sin rimar

Sin identitad
Rumbo a mar abierto
Con el mundo por montera
Y los cordones medio sueltos

Las musas aparecen de noche

En esta letra de pasodoble con música de la comparsa Las Estaciones (Tino Tovar) expreso cómo normalmente la inspiración para escribir me sobreviene de noche.


Siempre en madrugada
viene a visitarme
esa a la que llamo
dulce inspiración. 

De un cuento de hadas
llega para darme,
trae entre sus manos 
mil versos de amor.
Y en su mirada ese brillo que me llena de pasión.

Siempre que llega me golpea en la ventana.
Yo la saludo, luego la invito a pasar.
Ella me guiña y se me pone a susurrar.
Todas las letras que de día no se atreven a brotar.

Cuando la mano me da.
Se para el tiempo
y se alinean las estrellas,
el Sol se esconde
y la luna se rebela.
Cuando las nubes se van
y las musas salen de su madriguera
los otoños se tornan en primaveras.
Aaaaay

La oscuridad rescata palabras de un viejo desván.
La noche infinita se pone a cantar
hasta que Selene se queda dormida.

Su melodía sonó,
rompiendo el silencio,
creando la magia,
urdiendo los versos,
firmando esta jarcha.

Su hechizo se deshace en la mañana,
las musas volverán noche tras noche
a mi ventana.


Pasodoble original de Las Estaciones (Tino Tovar)

domingo, 2 de junio de 2019

Homenaje a Juan Carlos Aragón

Personalmente, cuando se nos fue Juan Carlos no solo sentí que se marchaba el poeta más rebelde y canalla nuestra bendita fiesta, por mi edad, yo que crecí escuchando chiriparsas como Las Ruinas Romanas o Los Yesterday y que me hice un hombre suspirando con Los Condenaos y Los Ángeles Caídos, también sentí que con él se marchitaba una parte esencial de mi ser que, aunque jamás perderé porque está bien grabada a fuego, nunca volverá a ser la misma. Ya no florecerá con la misma intensidad esa ilusión de cada febrero por disfrutar de una nueva letra, de una nueva melodía suya, de una nueva bala directa a las sienes de la conciencia. Esas mariposas que un estreno carnavalero provoca en las tripas de los aficionados más ávidos de coplas ya no revolotearán tan fuerte como antes.

Quisiera compartir con vosotr@s una breve anécdota, absolutamente verídica a pesar del tinte narrativo que envuelve la historia, de algo que me pasó pocos días después de fallecer Juan Carlos. Os doy mi palabra de que este relato onírico y todos los detalles que se describen en él son absolutamente ciertos. La magia de los sueños.

3 noches después de la muerte de Juan Carlos, como si del mismísimo Jesús de Nazaret se tratase, tuve un sueño muy idílico. Yo me encontraba de noche apoyado sobre la balaustrada de la Caleta mirando la inmensidad del mar. De repente, comienzo a sospechar como si alguien se acercase a mí desde lejos. Giro la cabeza hacia mi derecha y atisbo una silueta difuminada que poco a poco se va acercando a mí. Era una nebulosa grisácea y cada vez más antropomorfa conforme se acercaba. Hubo un momento en que llegué a distinguir que aquella figura portaba a su espalda una guitarra a modo de fusil de coplas (luego me percaté que mi subconsciente con esto me estaba recordando a aquel magnífico pasodoble de los Parias que comienza: Ay cada vez que me emborracho…). Cuando a esta silueta apenas le separaban de mí unos pocos metros, le pregunté: ¿Quién eres?, ¿adónde vas?

De repente, esta figura dejó de ser etérea, levantó la mirada del suelo y, sin hablar, me lanzó una media sonrisa canalla. Al instante lo vi claro, era Juan Carlos. A mi pregunta de hacia dónde se dirigía, me respondió con un gesto con la cabeza y que acompañó con la mirada, señalando en dirección al Falla.

En ese mismo momento me desperté del sueño y, todavía de madrugada, me decidí a levantarme de la cama para plasmar esta historia dándole forma de pasodoble. Esta letra está diseñada a base de continuas menciones, más o menos veladas, a su trayectoria carnavalera. Con la música de los Ángeles Caídos, os presento el pasodoble que jamás quise escribir. Gloria eterna al Capitán.



¿Adónde vas peregrino?
Voy caminito del Falla.
Pa que la luna canalla
me acoja como vecino

Y esta guitarra bendita
conmigo cumple condena,
sus cuerdas ya se marchitan
pero es mi fiel compañera.

Mírate en los corazones
de los gaditanos, 
de los andaluces,
del aficionao,
esos que has dejao
llenitos del veneno.

El veneno que se escapa
cuando el pueblo canta
y arden las gargantas
de 'toita' tu chusma
rezando ese credo de los carnavales

Que tu verso es una bala
directa a las sienes.
Los acordes son rehenes
de tu rebeldía.

El poeta de Cai.
Más golfo no lo hay.
El hippy y el romano,
el tinto de verano
de las libertades

El capo más cubano,
el indio americano.
Un ángel desterrao
por haber cantao
mil coplas prohibidas.

Pero aunque estén prohibidas
no dejarán de sonar
porque es lo que da la vida
a los carnavaleros
siempre que llega febrero.
Tu magia ya es inmortal.




                                                         Pasodoble original de 'Los Ángeles Caídos'

lunes, 6 de marzo de 2017

Amor del sur


De nuevo viene a visitarme durante un rato la inspiración para traerme unos cuantos versos que encajan, esta vez, en la fantástica música creada por el genio carnavalero Juan Carlos Aragón para su comparsa Los Peregrinos (2017).



El hombre que busca el amor y lo encuentra 
se hace inmortal. 
Ya no entiende de miedos
ni de soledad.
Se convierte en poeta,
se hace profeta,
se muda hasta el cielo. 

El hombre que encuentra el amor y lo cuida.
Amor, es como una canción 
con notas de pasión,
un murmullo en el alma.
Amor, es perder la razón, 
un vuelco al corazón 
que te alegra la vida.
Amor, es la revolución 
de un agosto ladrón 
que te roba la calma.

El amor, te digo que el amor
es una llave que abre la puerta
de un viejo balcón
que mira al horizonte.
Es una emboscada,
es como una espada
que a veces se clava,
te embiste, te atrapa,
te hiela la piel.

El amor es como un grito
que hacia el infinito 
retumba y estalla.
El amor es la batalla
que te hace renacer.

El amor es una barquilla
a la que empuja el levante.
Un paseo que por la orilla
embruja a dos navegantes. 

El amor es como el camino
en una playa escondida.
El sendero que al peregrino
Le cura 'toas' sus heridas.

Otoño de primaveras,
flores que no se marchitan.
El beso en una escalera
que al corazón resucita

Es un instinto animal
que destroza sus cadenas,
que se suelta la melena
cuando llega carnaval.

Es el cuento de un portal
de una noche de verano,
cuando la luna y el sol
se cogieron de la mano.

El amor es un castillo,
un fuerte de libertad,
es un baluarte que da hacia el mar
y que te protege del oleaje.

El amor es la clave
que cobra forma de ave
y que vuela salvaje.





 Agrupación original. Comparsa los Peregrinos